El Tridente Dominicano que Impulsa el Sueño de los Marlins en Octubre

MIAMI, FL.- En la reñida batalla por un boleto a la postemporada de la Liga Nacional, los Marlins de Miami han encontrado su arma secreta en un poderoso tridente de lanzadores dominicanos. Con el equipo a las puertas de la marca de .500 (56-57) y la vista puesta en el último puesto de comodín, son los brazos de Eury Pérez, Edward Cabrera y el resurgente Sandy Alcántara los que están marcando el ritmo de la carga de “los Peces”.

Este dominio desde el montículo ha sido el motor detrás de una racha histórica para la franquicia, que recientemente ganó seis series consecutivas por primera vez desde su temporada de campeonato en 1997, demostrando que sus aspiraciones son serias.

El joven fenómeno, Eury Pérez (4-3, 2.70 ERA), se ha convertido en una pesadilla para los bateadores rivales. En sus últimas seis aperturas desde el 3 de julio, el derecho ha sido prácticamente intocable, permitiendo apenas 15 imparables y acumulando 37 ponches, con una oposición que le batea un anémico .132. Su rendimiento lo ha colocado en los libros de récords del equipo como el primer lanzador en la historia de la franquicia en mantener una efectividad por debajo de 1.50 en un tramo de seis juegos permitiendo tan pocos hits.

A su lado, Edward Cabrera (3-3, 2.31 ERA) ha formado un muro infranqueable. Desde principios de julio, ha exhibido un control excepcional, concediendo solo cinco boletos y ponchando a 34 contrarios. Su WHIP de 0.87 en ese lapso evidencia un dominio absoluto que será puesto a prueba nuevamente este viernes contra los Bravos de Atlanta.

Completando la troika está el as del equipo, Sandy Alcántara. El ganador del Cy Young de 2022 parece estar recuperando su forma imperial justo en el momento más crucial. En sus salidas del 23 y 29 de julio, lanzó 12 entradas magistrales en las que no permitió carreras limpias, un claro mensaje de que el líder de la rotación está de vuelta.

Con este trío quisqueyano en plena forma, los Marlins no solo han elevado el nivel de su pitcheo, sino que han inyectado una dosis de esperanza y confianza en su fanaticada, que ahora se atreve a soñar con ver a su equipo compitiendo en la postemporada.